1. Sexo espontáneo. Una noche de pasión con alguien que se acaba de conocer puede resultar muy excitante, aunque no hay que olvidar las precauciones y cuidados sexuales necesarios, como el uso del condón. La noche puede ser inolvidable, pero luego de terminar, nada de intercambio de teléfonos ni nada, la gracia de esto es lo desconocido.
2. Sexo premeditado. Quedar con alguien para una larga noche de pasión, o tal vez sólo algo rápido. Descargar la tensión y pasar un buen rato es lo indicado. Lo interesante aquí es que la cita puede ser con alguien que apenas conoces, o muy poco.
3. Sexo “reloaded”. Repetir la experiencia con ese alguien “x”. Muchas veces la vida sigue trayendo a las personas que se creían olvidadas, hay que aprovechar ese momento.
4. Sexo solidario. De “buena gente”, se puede dar una oportunidad a la persona que no llama tanto tu atención; quizás de una sorpresa.
5. Sexo “nostálgico”. Llamar a una expareja para tener relaciones sexuales, puede ser un arma de doble filo; por una parte, ya se conocen y el sexo puede ser mucho más divertido, aunque si alguno de los dos todavía tiene sentimientos por el otro, puede ser el inicio de una complicada “relación” sexual.
6. Sexo “de amigos”. Siempre es bueno tener una persona a la que llamar de vez en cuando para cumplir deseos carnales. Aquí el riesgo es que la persona no esté disponible cada vez que den ganas.
7. Sexo de odio. Acordarse del dicho: “si te molesta, es porque quiere contigo”. Esto es algo parecido.
8. Sexo por consuelo. Tuviste un día horrible en la oficina, se murió tu perrito o acabas de romper con el amor de tu vida y necesitas calor humano para reconfortarte. Tal vez tengas que pedirle a alguien que te haga el favor.
9. El temporal. Es el tipo de sexo que muchos tienen mientras aparece una pareja permanente en su vida. El bar de los happy hour o el club literario pueden ser considerados como “agencias de empleo temporal”.
10. Sexo “sorbet”. Este tipo de sexo sin ataduras es el que una persona tiene para quitarse el mal sabor que le dejó un(a) ex. El nombre es por la similitud con el sorbet que dan en las cenas formales para limpiar el paladar entre un platillo y otro.
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