Responder las siguientes preguntas le podrá ayudar a ver si usted padece de adicción al sexo o va por ese camino.
- ¿Le esconde a los demás su vida sexual, es decir, no le gusta hablar del tema en lo absoluto, ni habla al respecto cuando tiene un problema?
- ¿Lleva una doble vida?
- ¿Se avergüenza de sus acciones porque considera que no son morales?
- ¿Practica sexo en lugares y con personas desconocidas sin poder evitarlo?
- ¿Siente remordimiento o culpa después de un encuentro sexual?
- ¿No consigue mantener una pareja estable por su conducta sexual?
- ¿Necesita cada vez mayor variedad y frecuencia en las relaciones?
- ¿Engaña a su pareja con otras personas, incluso desconocidas?
- ¿Su conducta sexual le trae problemas legales (prostitución, llamadas obscenas…)?
Si seis respuestas fueron afirmativas, busque ayuda profesional, es muy probable que usted tenga una adicción no sana al sexo, esto puede afectar para mal su vida.
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