Todas las chicas alguna vez en su vida han soñado o se han imagino siendo actrices. ¿Te has preguntado realmente que algún día ese sueño puede hacerse realidad?. No importa si eres una persona tímida e introvertida, pues esto se trata de crear tu propio montaje dentro de tu casa. No necesitarás una gran sala, ni nadie que prenda y apagues las luces más que tú y tú pareja.
Si quieres tener una nueva arma de seducción, vamos a hacer lo que nunca antes has pensado, crear tu propio teatro sensual en tu hogar. Solo se trata de disfrutar del sexo y dejar de lado la fastidiosa rutina sexual que se viene teniendo hace tiempo.
Para empezar a crear un teatro erótico dentro de tu casa, todo lo que tienes que hacer es conseguir una forma de representación que más te guste. No sólo pienses en un drama, puedes escoger alguna danza, alguna canción, o cualquier forma de representación que te guste, y empezar a trabajar sobre ella y su interpretación, de qué forma lo harás, qué es lo que te gustaría hacer, cómo te gustaría verte, qué quieres provocarle a él, etc.
Luego tendrás que ponerte a pensar qué ropa es la que necesitarás para montar la pequeña pieza que has escogido. Un personaje puede verse de diferentes maneras, y todo lo que lleves puesto va a crear diferentes sensaciones en el espectador. Si quieres divertirlo con algo super sensual, puedes consultar las opciones de disfraces y vestimentas que tienen los sexshops para ti.
Además debes saber que todo teatro es una especie de recinto, y por eso tu casa también debe serlo. Elije un lugar adecuado para delimitar un espacio de representación en donde él no tendrá acceso, y tú harás tu magia. Puedes elegir algún tipo de luz particular para iluminar el propio lugar, si vuelves al teatro antiguo, quizás puedes iluminar con velas. Si lo deseas puedes utilizar algunos aromatizadores para darle un toque más personal y activar el sentido del olfato.
Puedes invitarlo a él a través de una entrada muy particular, o bien establecer una propia boletaría en tu portaligas. Puedes jugar a la actriz o a la directora, todo lo que necesitas es correrte del lugar de mujer que ocupas cotidianamente y cambiar la imagen por completo para volverlo loco.
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