Posiblemente como mujer sepas lo que vemos a simple vista sin experimentar mucho más allá de los límites.
En la anatomía femenina, principalmente los genitales externos de la mujer, se encuentran partes importantísimas que veremos a continuación.
Partimos con el Monte de Venus, el cual es un tejido graso blando que cubre el hueso pelviano. De forma más simple es dónde tenemos los vellos púbicos. Generalmente es muy notorio cuando la mujer está desnuda o cuando usa ropa ajustada.
También están los labios mayores, que son dos pliegues de piel, en algunos casos se parecen más a montículos que a pliegues, que definen la hendidura vulvar y protegen las zonas más delicadas de la vulva.
La porción anterior de cada labio mayor es usualmente más gruesa que la posterior, afinándose y fundiéndose con el perineo.
Los labios menores, son también una parte importante en la anatomía femenina, estos están hechos de tejido eréctil esponjoso suave que contiene una concentración densa de vasos sanguíneos, el mismo tejido que rodea la uretra en el pene. Estos están poblados por muchas glándulas productoras de aceite, pero están desprovistos de células grasas. Normalmente son muy elásticos.
Llegamos al más importante, el clítoris, el cual es un órgano muy complejo y especializado. Aunque no lo crean, tiene sólo un propósito, darles placer sexual a las mujeres. Es tan importante para la mujer, como lo es el pene para los hombres.
El clítoris está formado por los mismos tejidos que el pene, y en su mayor parte, funciona similar que un pene, sólo que no contiene espermatozoides.
Dejar una contestacion